11 de enero de 2016

El Feng Shui


El Feng Shui, de orígen ancestral, es ahora lo que también defiende la Geobiología con sus redes telúricas, las fallas subterráneas, de ondas de forma o del llamado "guardián del lugar" (una entidad creada durante la construcción del edificio con el objetivo de velar por el proyecto de vida de sus habitantes...).

Ya conocido es que los Romanos, cuando decidían hacer un poblado, dejaban pastar sus ovejas hasta ver dónde se asentaban más tiempo. O cazaban según que animales para observar si su hígado estaba sano.

Pero ¿de qué trata el antiquíssimo Feng Shui?

El Feng Shui trata de la organización de la forma más natural posible, de todo lo que nos rodea: muebles, casas, calles, luz, ambientes, incluso el comportamiento humano, y todo en base a las leyes naturales de la tierra.

Nos habla de las perturbaciones energéticas que podemos encontrar en los edificios y que termina por afectar a sus habitantes, tanto en su salud como en su bienestar emocional. Es así como la arquitectura oriental organiza sus edificios para hacerlos más saludables y confortables, pocos edificios hay en Hong-Kong que no se basen en ello.

Todos hemos notado como al entrar en algun local, casa, piso, prácticamente de forma  inmediata vemos si nos sentimos cómodos o no, sin saber el porqué.

¿Qué es lo que nos hace sentir "acogidos" por ese edificio?

Nos hace sentir bien cuando no hay columnas por medio o, si las hay, están iluminadas o decoradas integrándolas en el espacio;
Nos hace sentir relajados y equilibrados si encontramos una pecera; 
Nos hace sentir bien si los colores son cálidos y no fríos;
Nos atrae el dinero si el edificio está en el número 28 o si los colores rojo y negro se combinan adecuadamente;

En una oficina jamás hay que situarse de espaldas a la puerta o ventana pues nos pone en situación de vulnerabilidad y hace que trabajemos menos;

Si dirigimos un espejo hacia la pared de los vecinos ruidosos, les calma...;
Si ponemos un espejo justo delante de la entrada, atraemos la energía positiva de la gente que entra, ahuyentando las energías negativas;
Incluso el Feng Shui nos habla de la influencia de las vidas de los que habían estado en ese espacio y ya no están...
Nos hace sentir bien si "hablamos" con el espacio dónde nos encontramos pidiéndole que nos acoja con gran respeto...
Por eso hay quien dice que todo es superstición, pero funciona.

Por eso ha pervivido en diferentes culturas y durante milenios en alguna como la Oriental.

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